La transformación digital se puede definir como la integración de las nuevas tecnologías en todas las áreas de una empresa para cambiar su forma de funcionar. El objetivo es optimizar los procesos, mejorar su competitividad y ofrecer un nuevo valor a los clientes.

Por lo tanto, no se trata simplemente de comprar computadoras más potentes, almacenar datos en la nube o instalar un ERP. La transformación digital implica un cambio en la mentalidad de los dueños y los empleados. Es una apuesta de futuro hacia nuevos métodos de trabajo que aprovechen todo el potencial de la digitalización.

La transformación digital hoy es necesaria e indiscutible, y debería estar entre las prioridades de una empresa.

La pandemia obligo a las empresas que aún no estaban aggiornadas a estas metodologías o herramientas a desarrollarlas, especialmente en lo concerniente al area comercial. La premisa es “adaptarse o perecer”.

Las empresas que estaban preparadas con estrategia comerciales digitales crecieron muy rápido y las que no lo estaban tuvieron problemas en responder, lo vimos ni bien empezó la cuarentena.  Lo que sucedió con la pandemia es que los planes pasaron a tener otra velocidad y prioridad, acelerando el crecimiento de los canales digitales.

Hoy la estrategia digital ocupa un capítulo especial en cualquier estrategia comercial o plan de marketing.  La realidad cambio y la forma de comercializar los productos y servicios también.

La empresa 100% digital es posible, de hecho ya existen varios ejemplos, hay bancos totalmente digitales. De ahora en más tener una billetera digital será muy importante, todos los comercios van a cobrar digitalmente. El posnet va a persistir, pero crecerá el pago de celular a celular

La transformación digital ya no puede considerarse una opción. En la actualidad, las empresas tienen la necesidad de renovarse adaptándose a la digitalización si quieren seguir siendo competitiva.